miércoles, diciembre 13, 2006

VAYA CON DIOS

Hace unos días tuve el inmenso placer en las noticias, televisión, radio, prensa, etc... de la defunción de un ex-dictador sudamericano. Sinceramente no me alegre, me hubiera gustado más verlo delante de los tribunales, y aunque hubieran sido sólo unos días en la carcel. Bien desde la distancia ( y sin tener conocimientos profundos del tema) , su muerte significa, al menos, eliminar un punto de conflicto en la sociedad de aquel país. No obstante, este dictador amaso una enorme fortuna que no le pertenecía, ni a él ni a sus herederos, espero que al menos en ese tema los tribunales chilenos se mojen. Nadie puede devolver las vidas, tampoco se pueden suprimir del recuerdo los sufrimientos y dejaciones, pero mi corazón se sentirá mejor si un tribunal condena a sus herederos a devolver ese dinero que robo desde el ejercicio de su poder, y se invierte en el pais.

No obstante Pinochet, es un ex-dictador, pero no olvidemos que todavía existen muchos en el mundo....

Chinogat